lunes, octubre 06, 2008

Más sobre mi pintor favorito...


De las cosas más bellas de este mundo, ninguna tan exitante y apasionada como las obras de Mark Rothko.

El museo de Londres abrió la exposición más grande de el hasta febrero del 2009.


En 1958 Rothko recibió una millonaria propuesta para cubrir las paredes del restaurante Four Seasons dentro del rascacielos Seagram de Mies van der Rohe. Dos años más tarde, dio marcha atrás, devolvió el dinero y decidió quedarse con las pinturas.

Recientemente su hijo, Christopher Rothko, declaró: "En ese momento me dijo que se propuso arruinar el apetito de cada hijo de puta que comiera en esa sala".